En el Callejón

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—No se que clase de conexión podría tener con alguien tan idiota—chilló Stark a su compañero Dacon. Queria simplemente limitarme a ponerme mis auriculares y escuchar música todo el viaje pero no podía, me sentía pésimo, principalmente por Pam, pero también por amenazar a Emma y no quería darme ningún tipo de placer.
—Si pudiera cambiarte lo haría hasta por el peor Cazador—replicó Dacon y yo reconcideré lo de los auriculares. Y ahí se hallaba otro de mis problemas ¿Dónde se encontraba ese supuesto enigmático compañero? ¿Por qué mamá y papá nunca me hablaron al respecto? Ellos siempre me cuentan todo.
—Hola—saludo un poco arisco James a un chico flacucho, era un chico lobo, muy pequeño, tendría doce o trece, se lo notaba muerto de miedo, habia estado mirando en los botes de basura de un callejón—Te eh dicho hola esquelético subterráneo
—Entiendo tu táctica—le comente a James tomándolo del brazo, su táctica era meterle mas miedo y controlarlo, ya lo habia hecho con un par de hadas, pero no habia funcionado muy bien, el miedo muchas veces los hace mentir si no son hadas—pero déjame probar a mi.
Stark suspiró con un dejo de exasperación y me dio paso caballerosamente.
El lobezno me miró y temblo un poco.
—Hola, mi nombre es Mason.
—Eres un cazador de sombras—masculló el nenito sin intentar esconder su miedo
—Si que lo soy, pero eso no significa que te vaya a hacer daño.
—Si hay algo mas gay me llamas—le dijo James a Dacon y ambos se echaron a reir. Al menos en algo los hice congeniar
—¿Cuál es tu nombre?
—Daron—murmuró el muchacho mirando hacia los costados
—¿De verdad?—pregunté tratando de lucir emocionado—Mi segundo nombre es Darius, los dos derivan de Dario.
—¡Ve al grano!—me rogó Dacon
—Necesito que me digas que has visto de la horda de demonios de ayer—Le pedí agachándome a su altura, tratando de no mostrar la desesperación que me carcomia, pero se que eso es algo imposible, la desesperación esta tatuada en mi rostro—Se llevaron a uno de los nuestros…Por favor Daron
El muchacho me miró al rostro boquiabierto y luego asintió.
—Cuando paso la horda encontré en el suelo lo que ustedes buscan, creo que pensaban que estaba muert…
—¡¿Cómo?!—chillo James acercándose.
—¡¿Donde esta?!—le suplique con la mirada , Daron se levantó y los guió por el callejón. ¡Pam! No podía pensar en otra cosa, ella ella…
—Aquí está—murmuró el pequeño señalando una caja humeda tapada por un nylon
Dacon soltó un bufido y James exasperó
—¿Nos estas tomando el pelo?—le gritó señalándole la huella, yo me sentí descepcionado.
—¡No no!—gritó asustado y se cubrió la cabeza—¡Tenía hambre, me lo iba a comer pero me dijeron que probablemente los Cazadores de Sombras vendrían por mí si lo hacia!
Miré extrañado a James y a Dacon y ellos me devolvieron la mirada, fui hasta la caja con mi huella en la mano, y con la que estaba libre saqué el nylon.
Quedé estupefacto al verlo, estaba destruido y apenas respiraba, era Apolo, el gato de la familia Coldheart.

El relato continúa en Central Park - El encuentro de Pam